En el primer trimestre de 2025 la Argentina registró un fuerte incremento del desempleo, con más de 1,1 millones de personas sin trabajo, lo que representa un aumento de 200.000 desocupados respecto a diciembre de 2024, y 300.000 más que a fines de 2023, según el informe “Las caras del desempleo” de la Fundación Encuentro, que advierte sobre un escenario laboral crítico, con un fuerte impacto en mujeres, jóvenes y jefas de hogar.
El relevamiento, compartido por la Fundación Encuentro esta misma semana, subraya que casi la mitad de las personas desocupadas tiene menos de 30 años, y que uno de cada cuatro desempleados es una mujer joven, dato que refleja un agravamiento de las brechas estructurales que caracterizan al mercado laboral argentino. En ese sentido, el desempleo en mujeres jóvenes trepó al 19,2 %, el nivel más alto desde los momentos más severos de la pandemia de Covid-19.
Es preciso mencionar que, el informe también alerta sobre un dato especialmente preocupante: uno de cada tres desocupados busca trabajo desde hace más de un año. Esta tendencia pone de manifiesto la creciente dificultad de los argentinos para reinsertarse laboralmente, sobre todo entre los sectores con menor nivel educativo o con trayectorias laborales interrumpidas.
Otro dato que agrava la crisis de desempleo que atraviesa la Argentina es que el 26,8 % de las personas sin trabajo es jefe o jefa de hogar, lo que implica que la pérdida de empleo impacta directamente en la estabilidad de los ingresos familiares y en la calidad de vida de miles de hogares, y representa un cambio importante respecto a trimestres anteriores, en los que predominaba el desempleo entre jóvenes sin responsabilidades familiares.
En tanto, la Fundación Encuentro identificó que la construcción, el comercio y el trabajo doméstico concentran la mitad del total de personas desocupadas, que se suman a un aumento significativo de la pérdida de empleo entre cuentapropistas, muchos de los cuales fueron tradicionalmente un refugio ante la falta de empleo formal.
En el plano geográfico, la región más afectada es el Gran Buenos Aires, donde la tasa de desempleo se ubicó en el 9,1 %. En contraste, en la Patagonia y el Noroeste argentino los niveles de desocupación se mantuvieron por debajo del 5,1 %, lo que evidencia una fuerte desigualdad regional en el acceso al trabajo.
Cabe señalar que, el estudio de la Fundación Encuentro advierte que el modelo de compensación basado en el autoempleo o en redes familiares “está llegando a su límite”, ya que “la informalidad ya no alcanza para absorber a quienes pierden su trabajo, y el desempleo abierto y prolongado empieza a consolidarse como una tendencia”. Esta situación tensiona aún más las condiciones sociales, y profundiza los márgenes de exclusión.
Ante este panorama, la Fundación Encuentro sostuvo que es necesario repensar las políticas laborales no solo desde la perspectiva del ingreso, sino con un enfoque de reactivación productiva e inclusión social. “Lo que estamos viendo ya no es solo precarización, sino expulsión del sistema laboral”, enfatiza el informe.
Es preciso mencionar que, el deterioro del mercado de trabajo no es homogéneo. Es que, las mujeres, los jóvenes y los trabajadores informales enfrentan las mayores dificultades para conseguir o mantener un empleo, lo que amplía las desigualdades preexistentes. Además, el incremento del desempleo prolongado pone en evidencia que quienes pierden su trabajo encuentran cada vez menos oportunidades reales de reinserción.
En este contexto, desde la Fundación Encuentro aseguran que las políticas de ajuste del Gobierno nacional, la paralización de la obra pública y la falta de impulso a sectores productivos son algunos de los factores que explican el aumento desmedido del desempleo en el país. Además, el informe señala que, sin intervención estatal, el mercado laboral seguirá excluyendo a millones de argentinos.
En los últimos meses, se observó una desaceleración en el ritmo de creación de empleo informal, lo que impide amortiguar el impacto de la caída del empleo registrado. Esta situación complica especialmente a quienes tienen baja calificación laboral o viven en zonas con menor actividad económica.
Por caso, el informe de la Fundación Encuentro destaca que los datos actuales “superan los peores registros post pandemia”, en especial entre las mujeres jóvenes, que enfrentan tasas de desempleo que triplican a las de los varones adultos. Esta disparidad no solo afecta el presente, sino que compromete las posibilidades de desarrollo futuro para una franja clave de la población.
Por último, la Fundación Encuentro propone medidas urgentes para revertir la tendencia de desempleo, entre ellas un programa federal de empleo para jóvenes, incentivos a la contratación con perspectiva de género, y una política activa de obra pública y desarrollo productivo, especialmente en regiones rezagadas.