Al igual que en el Senado, la legisladora del GEN, Natalia Dziakowski, ingresó en la Cámara de Diputados bonaerense un proyecto de ley para prohibir los cigarrillos electrónicos en los espacios cerrados de acceso público y de uso colectivo, como así también en todos los lugares de trabajo en la provincia de Buenos Aires.
La iniciativa, que lleva la autoría de Dziakowski, pretende prohibir en todo el territorio de la provincia de Buenos Aires “el uso de dispositivos electrónicos de administración de nicotina, dispositivos electrónicos sin nicotina y sistemas similares, conocidos como ‘vapers’ o ‘cigarrillos electrónicos’”.
En ese sentido, la normativa pretende que sea penado por ley el uso de cigarrillos electrónicos en oficinas públicas y privadas, establecimientos educativos, centro culturales y/o deportivos, medios de transporte, centros comerciales, bares y restaurantes.
No obstante, quedan exceptuados de esta prohibición los espacios específicamente destinados para el uso de cigarrillos electrónicos, los populares “sectores para fumadores”, siempre y cuando se encuentren físicamente separados y correctamente ventilados.
“Los cigarrilos electrónicos, promovidos inicialmente como una herramienta para dejar de fumar, demostraron ser una fuente significativa de exposición a sustancias tóxicas. A través de su aerosol, érroneamente denominado ´vapor´, emiten compuestos nocivos como nicotina, propilenglicol, glicerina vegetal, metales pesados y partículas ultrafinas”, alertó Dziakowski.
Por caso, la diputada del bloque Acuerdo Cívico recordó que en 2021 la Organización Mundial de la Salud (OMS) que los cigarrillos electrónicos “no son inocuos”, es decir que sí hacen daños, y que impactan de lleno en la salud respiratoria, especialmente en los jóvenes, quienes son los principales usuarios que fuman vapers.
En cuanto a las sanciones, la ley estipula apercibimientos, multas económicas e incluso las clausuras temporarias del lugar en el que se esté utilizando cigarrillos electrónicos. En tanto, las personas jurídicas que estén en falta deberán cumplir horas de servicio a la comunidad.
“Tanto la Ley Nacional N°26.687 como la Ley Provincial N°13.894 no contempla los vapers y otras regulaciones provinciales varían ampliamente. Urge que la provincia de Buenos Aires se posiciones con una legislación clara, protectora y coherente con los estándares internacionales de salud pública”, exigió Dziakowski.
También, la propuesta de la legisladora opositora obliga al Ministerio de Salud y a la Dirección General de Cultura y Educación a desarrollar campañas informativas permanentes respecto de los riesgos del uso de cigarrillos electrónicos y los beneficios de ambientes libres de humo y aerosoles.
Vale recordar que, en el Senado bonaerense se está tratando un proyecto para prohibir los cigarrillos electrónicos en la provincia de Buenos Aires, de la legisladora también del GEN, Lorena Mandagarán, que ya fue despachado por la comisión de Salud Pública de la Cámara alta.
En rigor, el texto propone la prohibición de la comercialización, distribución, exhibición, publicidad y patrocinio de los cigarrillos electrónicos y los productos de tabaco calentado con el fin de “promover, asistir e impulsar la salud y el bienestar comunitario de sus habitantes de la provincia de Buenos Aires”.
